Una guía para transformar su espacio en un paraíso navideño por excelencia de Quebec.

El aire fresco, las calles cubiertas de nieve, las luces centelleantes y un ambiente cálido que lo envuelve todo: ¡es la temporada mágica de Navidad en Quebec! Cuando empiecen a caer los copos de nieve, es hora de desempacar las cajas de adornos, encender la chimenea y dedicarse a los preparativos de la fiesta. Aquí tienes una guía completa para transformar tu espacio en el paraíso navideño quebequense por excelencia.

1. Luces brillantes:

Empieza por iluminar tu hogar con luces festivas. Opta por guirnaldas de luces LED, faroles en forma de estrella y proyectores para exteriores para crear un ambiente mágico. Las fachadas de las casas quebequenses, adornadas con mil luces, convierten cada calle en una verdadera obra de arte invernal.

2. Coronas y decoraciones para puertas:

Las coronas navideñas no están reservadas solo para los cuentos de hadas. Agregue un toque festivo a la puerta de su casa con una corona adornada con frutos rojos, piñas y cintas de colores. Es la primera señal de que la magia de la Navidad ha llegado a tu hogar.

3. Árboles de Navidad tradicionales:

Nada simboliza mejor la Navidad que un árbol decorado. En Quebec, muchos optan por los árboles naturales, que llevan al interior el embriagador aroma de los bosques nevados. Adornalo con bolas rojas y blancas, adornos en forma de caribú y no olvides la estrella brillante que tiene en la parte superior.

4. Decoraciones hechas a mano:

Elige decoraciones hechas a mano para añadir un toque auténtico a tu interior. A los niños les encantará crear bolas navideñas de papel maché, convertir calcetines de lana en medias o hacer adornos con masa de sal. Estas creaciones aportan un toque extra de calidez a tu decoración.

5. Colores cálidos:

Opta por una paleta de colores cálidos, típicamente invernales. El rojo, el verde, el blanco y el dorado son opciones clásicas que evocan la tradición quebequense. Las mantas tejidas, los cojines mullidos y las alfombras acogedoras añaden una capa adicional de comodidad a tu espacio.

6. Decoraciones exteriores:

No olvides hacer brillar tu jardín o balcón. Las luminosas figuras de muñecos de nieve, renos e incluso Papá Noel crean una escena de cuento de hadas que se puede admirar desde fuera.

Las decoraciones hechas a mano añaden un toque de calidez

7. Ambiente acogedor:

Por último, cree un ambiente cálido con velas aromáticas, mantas cómodas y una taza de chocolate caliente. Las largas tardes de invierno en Quebec son perfectas para disfrutar de momentos relajantes en familia o con amigos, envueltos en el suave resplandor de las luces navideñas.